Por Arianna Fonseca


Nació Luis como las flores
con la esperanza madura,
y tatuó con su amargura
la voz de los ruiseñores.
Supo llorar sus amores
y aliviar con la tonada
la jarana cultivada,
las raíces campesinas,
las metáforas más finas
y el recuerdo de su amada.


Tomado del libro Bajo el ala de un sinsonte. La pereza Ediciones, Miami, Fla., EE.UU., 2017. (N. del E.).