Por Osmeidy Águila
Vivir como íes sin punto,
soñar con prórrogas tan falsas,
es como dilapidar tus onzas de albedrío,
un barco sin timón y sin regreso.
Abrir los ojos un día
es ya ganar una batalla,
es derecho de todos,
aunque todos piensen bien derecho.
Abre paso donde los demás queden,
porque no se ignoran las luces
que van a tu favor;
están hechas para todo el
que no tenga camino.
Tomado de la Antología Poetas de fin de siglo en San Felipe de Cumanayagua, Ediciones ¡Ánimo!, Cienfuegos, Cuba, 1999. (N. del E.).