Por Pedro Péglez

Ondea el cisne
Navega su tesitura de esmalte níveo
En el espejo esparce su señorío
de vela hacia el azul
Nadie crea que es un ave
No
Es un lábaro que borda al agua
el heraldo de algún dios
Nadie repita
que viva el cisne que viva
(No sea que cuaje en mármol)