Por Ulices Trujillo 


Llega el día con sus hilos
de luz y, sobre la nieve,
la novia inmóvil se atreve
a un sollozo de pistilos.
Parece mellar los filos
del invierno (sus puñales).
Entre las ramas (panales
de cálida clorofila)
el eco de un trino apila
la esperanza en los cristales.