Por Hansrruel Aldana (El Poeta de Junio)

 

Pero esta vez yo me rindo,
porque el mar me sigue
mirando de lejos,
porque estoy tan roto
que luchar no puedo,
porque duele el alma,
y vivir da miedo.
Esta vez me rindo.
Esta vez no quiero
levantar las manos
y empezar de nuevo.
Esta vez renuncio
a soñar mi sueño,
esta vez me marcho
del mundo en silencio.
Con las manos rotas,
con el pecho abierto,
con la luz marchita
de sentirme preso.

Esta vez me rindo,
esta vez entierro
mi esperanza trunca,
mi valor longevo.
¡Y que venga el frío!
¡Y que venga el miedo!
¡Y que venga el hambre
de soñar un sueño!
Que yo aquí los miro,
que yo aquí los siento,
y aunque esté vencido,
igual los espero,
para que me vean
sucumbir de nuevo.
Esta vez me rindo.
Esta vez reviento.
Esta vez suspiro
y empiezo de nuevo.
Porque aunque me rinda
y me entregue al fuego,
estoy hecho de río
que inunda al desierto,
estoy hecho de luces,
de valor, de esfuerzos,
de sonrisa eterna,
y de un sol intenso.
Por eso me rindo,
y otra vez regreso.
Porque sigo vivo,
porque estoy despierto,
esperando el siglo
que nos encontremos.
Porque no soy nadie
sin tu amor, por eso.
Porque tú me empujas
a romper el miedo,
porque yo soy tuyo,
porque yo... Te quiero. 

 

Versión-respuesta al poema “No te rindas”, de Mario Benedetti. (N. del A.).