Por Lágrimas de una Condesa

 

Diáfana noche
Trae en perennes recuerdos de lo inmortal
¿Qué es el tiempo?
Oscuro abrazo a la nada
El beso límpido de la soledad
Que clama sollozando el sueño realizar.

Mis entelequias portentosas
Se pasean entre árboles muertos
De vastas praderas que el viento acaricia mi nada
Mientras esta extraña voz mía
Reclama encontrar el edén de su mirada.


Caí al abismo

En el recuerdo de la espera
De la noche estrellada grisácea.

En esta oscuridad espero a la muerte
En el abrazo frío sin esperanza
Sin consuelo, ni una sincera palabra.


Duelen las espadas clavadas en el pecho,
la noble dulzura de voces miel
en la locura que desborda lo casi puro.

Mi nombre se llevará el viento hacia las nubes,
la belleza de la soledad amará mi esencia en esta oscuridad.

El oscuro deseo se hará realidad
Cerraré los ojos para volverte a ver
Espero conocerte en ese desvelo.

Mi alma libre será.