Por Claudia T. Cabrera

Te siento entre los cantares
asentados en mi pecho,
porque tu voz armoniza
desde el aire que te siento.
Con cuartetas de esperanza
haces liras del esmero
por un retorno apacible
sobre el arca de un espejo.
El azul de las tonadas
le da coraje al consuelo,
donde aparece tu estampa
con los acordes de un eco.
La raíz de la bondad
hace florecer lo bello
de tus palabras erguidas
bajo la escolta de un sueño.

Con este romance la autora obtuvo Mención en el Encuentro-Debate Municipal de Talleres Literarios. Casa de Cultura Habarimao, 16 de septiembre de 2022. (N. del E.)