Imprimir

Por Elizabeth Álvarez

Sapito Sapón
tuvieron un barco,
su mar siempre fue
un revuelto charco.

Y miedo tenía
hormiga viajera,
río abajo va
cantando a capella.

Y los tres pichones
fueron marineros,
el nido de paja
era su viajero.

Entre capitán,
soldado y grumete,
este lindo viaje
es de azul celeste.